La música es muy importante en la primera etapa de educación, por ese motivo, en el Centro de Educación Infantil de Valencia La Paloma,
 la música se introduce en la vida de los niños en edades muy tempranas 
porque aportan un gran beneficio en el pleno desarrollo de los más 
pequeños, tanto a nivel intelectual como sensitivo, motriz, etc.
De esta forma, este centro de educación junto con la colaboración de Imaginarium,
 quien facilitó los instrumentos para la realización del taller, aportan
 su granito de arena a la estimulación infantil con talleres familiares 
para que padres, madres e hijos puedan disfrutar de un momento agradable
 escuchando música y además, practicándola.
 Es muy importante motivar a los niños a escuchar música tanto en casa como fuera de ella, porque la música es capaz de aportar autonomía
 en sus actividades habituales y, además, amplía sus relaciones con el 
entorno. El niño o la niña que escucha música aprende a convivir con el 
resto de iguales y por ese motivo, durante el taller de música que se 
celebró en La Paloma, se sentó a todos los pequeños juntos, mientras el 
duende Plin Plan les explicaba con un cuento el origen de la música y de
 los diferentes instrumentos.
Es muy importante motivar a los niños a escuchar música tanto en casa como fuera de ella, porque la música es capaz de aportar autonomía
 en sus actividades habituales y, además, amplía sus relaciones con el 
entorno. El niño o la niña que escucha música aprende a convivir con el 
resto de iguales y por ese motivo, durante el taller de música que se 
celebró en La Paloma, se sentó a todos los pequeños juntos, mientras el 
duende Plin Plan les explicaba con un cuento el origen de la música y de
 los diferentes instrumentos.
Durante este taller de música todos disfrutaron mucho cantando y bailando sin parar, estas dos acciones también favorecen el desarrollo de los niños, porque cantando el pequeño mejora su forma de hablar y de entender el significado de cada palabra. Es una forma muy divertida de aprender cosas nuevas y de fortalecer la concentración en ellos. 
Todos estos beneficios ayudan a conseguir la autonomía del niño. Con el ritmo los niños no dejan de bailar y esto favorece y estimula la coordinación y la expresión corporal del niño, porque se siente libre frente a los acordes de las canciones para expresarse.
 
 



